Ser un ciudadano en la sociedad digital, es ser
ciudadano en dependencia de otros, con otros y para otros. Un ciudadano colectivo.
Un ciudadano dispuesto a dar más que a recibir. Por lo tanto, no encuentro
adecuadas las palabras culto y autónomo, porque entiendo que “culto”, aquel
dotado de conocimientos, y creo que, desde éste enfoque está planteado,
refuerza el ser individual y lo reafirma la palabra autónomo, alimentando la
línea de pensamiento sobre un ciudadano desde su individualidad y para su
individualidad.

La sociedad digital, ha transformado los vínculos
sociales, políticos y económicos hacia la colectividad. Implica desarrollar más
la capacidad interpersonal que intrapersonal. Un ciudadano flexible a la
constante interacción, para lograr el avance colectivo. Es imperioso construir
ciudadanía desde la ciudadanía, con la ciudadanía y para la ciudadanía.